Quienes se sienten a ver Triangle of Sadness, la nueva película del sueco Ruben Ostlund que este año se llevó la Palma de Oro en el Festival de Cannes y ahora es una de las 5 candidatas a Mejor Película Musical o Comedia en los Globos de Oro, deben predisponerse a vivir un viaje en el que todo puede llegar a ocurrir.
Eso es lo que propone esta historia que también escribió Ostlund, con una larga trayectoria ganando destacados premios. El cineasta se llevó el Oso de Oro al Mejor Corto en el Festival de Berlín en 2010 por Incident in a Bank, el premio mayor en la sección Un Certain Regard del Festival de Cannes en 2014 por Force Majeure (película que luego fue adaptada por Hollywood) y la Palma de Oro por The Square. Ambos filmes aspiraron también al Globo de Oro.
En Triangle of Sadness, los protagonistas son una pareja de influencers, la bella Yaya (interpretada por la sudafricana Charibi Dean, que falleció en agosto de este año a los 32 años) y el apuesto Carl (Harris Dickinson) cuya relación romántica está en crisis y no saben si seguir juntos para sumar seguidores o si terminar de una vez por todas.
Sin embargo, cuando Yaya es invitada a participar de un crucero de súper lujo junto a un grupo de multimillonarios para escribir una crónica sobre su experiencia allí, los dos dejan sus diferencias de lado y se embarcan, sin imaginar que sus vidas pronto cambiarán para siempre. Durante unos días disfrutaran de los tremendos lujos del Cristina O, que alguna vez perteneció a Aristóteles Onassis, de casi 100 metros de largo, sin prestar mucha atención a que el capitán, interpretado por Woody Harrelson, parece mucho mas interesado en encerrarse a beber en su camarote que en hacerse cargo de sus funciones.
Cuando finalmente acepta presidir la celebración de una noche especial, no prestará demasiada atención a que en la fecha que ha elegido se avecina una tremenda tormenta. Lo peor de la velada no son los vómitos a granel que provocan las grandes olas, sino el naufragio que obligará a los sobrevivientes a adoptar nuevas reglas de vida en lo que creen que es una isla desierta. Allí Abigail (la actriz filipina Dolly de León), quien trabajaba calladamente en la cocina, se convierte en la nueva líder ya que es la única que sabe pescar y cocinar.
Durante la presentación de la película en el Festival de Cannes, Ostlund explicó cual fue el origen de la historia. “Hace unos 8 años conocí a la que hoy es mi mujer, que es fotógrafa de modas. Ella me contó cómo la industria de la belleza promociona sus productos, y entonces comprendí que la belleza puede ser una moneda de cambio. Entonces me di cuenta que la belleza es atractiva pero también escalofriante, porque tiene un tremendo poder estableciendo jerarquías”, dijo.